sábado, 23 de agosto de 2014

Levanta la vista!

Las aves que vinieron a Europa a reproducirse ya vuelven. Cualquier paseo incluso por el parque de tu pueblo o ciudad puede demostrar al más escéptico el milagro de la migración. Y es gratis; tan solo hay que levantar la vista y mirar. 

Tarabilla norteña (Saxicola rubetra) Winchat
Carraca (Coracias garrulus) Roller
Estos días entre el voyyvengo y algún rato de descanso echo un ojo de cuando en cuando al cielo y compruebo -no podía ser de otra manera- que ya van apareciendo los migradores más madrugadores. Si hace poco más de una semana pude ver los primeros -y pequeños- bandos de abejarucos comenzando a bajar al sur, alguna tarabilla norteña descansando en su atalaya o incluso capturar en la Albufera un carricero común nacido hace unas semanas y anillado en Francia, esta semana ya he tenido la suerte de observar movimiento de rapaces, bandos más consistentes de abejarucos que muchas veces oyes sin poder localizar, algún vencejo real e incluso ayer pude ver en mi propio pueblo una carraca (tercera vez en mi vida que veo esta especie dentro del término, y hoy seguía en el mismo sitio). Y a los limícolas no he tenido tiempo, pero de seguro que ya está la cosa interesante, pudiéndose observar por estas fechas algún que otro ejemplar mostrando al menos parte de plumaje nupcial.


Pues eso: ahora es buena época para salir al campo y ver el paso, el que tenga un rato que no lo dude.

domingo, 10 de agosto de 2014

Ciao, pichi

Hoy se cumple una semana de esto que voy a contar, pero dicen por ahí que más vale tarde que nunca...
El caso es que para menos de 24 horas después de publicar la última entrada teníamos programada una salida al campo con familia y amigos a la zona de Tuéjar, en la comarca de los Serranos o Alto Turia como también les gusta llamarle a los del lugar. Imprescindible para los que hacemos vida en la franja costera huyendo de la masificación y bochorno playeros. Y allá que nos fuimos con pichi. Su evolución estaba siendo espectacular, evidente de la mañana a la noche, cada vez más fuerte y atrevido. Y cada vez comiendo más, por las mañanas sesión de ejercicio y revisión para ver cómo iba. Con 18 gramos de peso, musculatura de párido e incluso una pequeña reserva de grasa, para ser libre tan solo le faltaba desplegar unos milímetros de primarias y la decisión para dar el salto... y lo dió el domingo.

Junto a esta fuente voló por 1ª vez
Nacimiento del Tuéjar...
Sucedió en el mismo nacimiento del río Tuéjar, seguramente por el bullicio de la gente. Pero prefiero pensar porque le gustó el paisaje o quizás porque tuvo envidia de sus hermanos aviones comunes o los más numerosos roqueros que surcaban el cielo. El caso es que pichi dió el salto; pensábamos que pararía a 4 o 5 metros como otras veces pero no: cogió velocidad y altura con la potencia típica de su especie y se perdió entre unos álamos... ni siquiera se llevó una anilla de recuerdo. Pensaba ponérsela por la noche, a la vuelta a casa. Porque se veía venir que le quedaban horas para independizarse.
Mi hija lloró aquel día hasta media tarde pero ahora sonríe cuando levanta la vista y ve pasar a los aviones. Después de la última entrada no hice más fotos de pichi, así que dejo alguna del paisaje que eligió para echar a volar.
Peña cortada, Chelva, Los Serranos

Peña cortada, Chelva, Los Serranos
Nido del allí mucho más abundante avión roquero. La Playeta, Chelva